SUFRIR.-

Siento mi Alma destrozada,

de tanto sufrir por ti.

No me aflijas mas amada,

porque me siento morir.

Para que quiero decir,

si no escuchas mi sentir,

porque empezaste a vivir,

cuando yo empecé a morir.

SABOR AMARGO.-

Creí que el Mundo se hundía,
y, que las estrellas caían del Firmamento.
Un sabor amargo había en mi boca.
Zumbaban mis oídos, y, mi vista se nubló.
En ese momento, comprendí que no me amabas.
Gracias,
por las horas felices que me has dado,
aunque muy caras las he pagado.
El sabor de la desdicha es muy amargo,
el de la venganza, no quiero probarlo.
Ciego fui, por no querer ver,
sin comprender que algún día,
tendría que suceder.
Cuando vi y comprendi,
me negué a tenerte que perder,
y, dejar de ser feliz.

LIBERTAD

Eres libre como el viento

y te veo tan feliz lejos de mi,

que yo, sintiendo lo que siento,

solo me queda morir por ti.

Gracias, por todo lo que me has dado.

Por tus besos, tus caricias,

y tu amor condicionado,

por tus palabras de aliento,

y aguantarme tanto tiempo.

Tu eres joven, yo viejo,

el haberme soportado,

es algo que yo no entiendo,

sin estar enamorada,

ni tener mas sentimiento.

FLOR DEL PARAISO

Una bonita Flor del Paraíso que se cultiva en los jardines de Casa Vista bella. Hace poco mas de un mes que han empezado a abrir. He intentado contar los colores que la componen, creo que he contado siete, como el Arco Iris, comprueben y comenten en mi blog si es cierto.

SALON DE LOS PLATOS

Hacia tiempo que no subía ninguna fotografía del Salón de los Platos, he aquí una donde se pueden ver en los platos el nombre del restaurante con su anagrama original

RECORDAR

Con los ojos entornados,

me he puesto a recordar.

Recordé tiempos pasados,

donde, de ti, me empecé a enamorar.

Ni eras niña ni mujer,

la inocencia en tus ojos,

aun se podía ver.

Mirada pura entre abrojos,

que yo, intente corromper.

Alabando tu pudor,

a los cielos yo clame,

pidiendo a Dios por mi perdón,

por haber sentido amor

en niña, que no mujer,

sin saber que con el tiempo,

la volvería a querer,

cuando ya fuese mujer,

y, que supiera de amor,

sin pasar por el dolor,

de tener funesto amor.

Como se abre la flor,

cuando ya la besa el Sol,

así tenga ella amor,

y, abierto su corazón

para el niño que la amo,

cuando ni era niña ni mujer.