miércoles, 16 de octubre de 2013

DESDE EL ORIENTE AL OCASO

 
Pueden los ríos correr,
por su curso al revés.
Puede el Sol aparecer,
por su Ocaso amanecer.
Puede la noche ser día,
y negro el día sería.
Pueden las aguas del mar,
toda la Tierra inundar.
Y, ser desierto lo que ahora es mar.
Rojo lo verde sería,
y verde el fruto al sazonar.
Que la Luna desplazara,
hoy el Sol al medio día.
Esto y mucho más podría pasar.
Pero jamás pasaría,
que mi corazón dejara de amarte,
ni un segundo, ni un minuto,
ni un solo día de mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario